1. TÍTULO Y CONTEXTUALIZACIÓN
El presente tema aborda uno de los aspectos fundamentales en los cuidados que debe proporcionar el Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) como parte del equipo asistencial del Servicio Andaluz de Salud (SAS). La higiene del paciente constituye una necesidad básica cuya satisfacción debe ser garantizada en todos los ámbitos sanitarios, desde atención primaria hasta especializada, siendo especialmente relevante en el entorno hospitalario.
Este tema se enmarca dentro del ámbito de la atención a las necesidades básicas de los pacientes, conectándose directamente con las competencias propias del TCAE recogidas en el Estatuto de Personal Sanitario No Facultativo de la Seguridad Social y desarrolladas posteriormente en la ordenación de competencias profesionales. Además, está vinculado a protocolos asistenciales del Servicio Andaluz de Salud para la prevención de úlceras por presión, control de infecciones nosocomiales y cuidados integrales al paciente.
2. RESUMEN/INTRODUCCIÓN
La higiene constituye una de las necesidades básicas del paciente que debe ser cubierta diariamente, ya sea por el propio usuario o, en caso de necesitar ayuda, por el Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE). Esta actividad va mucho más allá de la simple limpieza corporal; representa un momento de gran intimidad que permite valorar el estado de la piel, establecer una relación de confianza con el paciente, detectar posibles problemas y promover el bienestar físico y psicológico.
En este tema abordaremos de manera integral las diferentes técnicas de higiene que debe conocer el TCAE (aseo general, del paciente encamado, técnicas parciales, etc.), los procedimientos para preservar la intimidad durante estos cuidados, así como los principios anatomofisiológicos de la piel. También analizaremos cómo adaptar estas técnicas según la edad, peso y patología del paciente, incluyendo los aspectos relacionados con la movilización y los cambios posturales. Todo ello con el objetivo de proporcionar cuidados de calidad, prevenir complicaciones como las úlceras por presión, y garantizar el confort y la dignidad de los pacientes durante su proceso asistencial.
3. DESARROLLO Y APARTADOS PRINCIPALES
1. PRINCIPIOS ANATOMOFISIOLÓGICOS DE LA PIEL
1.1. Estructura de la piel
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, con una superficie aproximada de 1,5-2 m² en un adulto medio. Está formada por tres capas principales:
- Epidermis: Es la capa más externa y superficial. Está compuesta principalmente por queratinocitos que se organizan en distintos estratos:
- Estrato basal o germinativo: donde se producen las células nuevas.
- Estrato espinoso: con células que presentan conexiones entre ellas.
- Estrato granuloso: con células aplanadas que contienen gránulos de queratohialina.
- Estrato córneo: capa más externa formada por células muertas llenas de queratina.
- Dermis: Capa intermedia compuesta principalmente por tejido conectivo, que proporciona resistencia y elasticidad a la piel. Contiene:
- Fibras de colágeno y elastina
- Vasos sanguíneos y linfáticos
- Terminaciones nerviosas
- Glándulas sebáceas y sudoríparas
- Folículos pilosos
- Hipodermis o tejido subcutáneo: Es la capa más profunda, compuesta principalmente por tejido adiposo. Funciona como aislante térmico, amortiguador de golpes y reserva energética.
1.2. Funciones de la piel
La piel desempeña múltiples funciones esenciales:
- Protección: Actúa como barrera contra agentes externos (microorganismos, sustancias químicas, radiación UV, etc.).
- Termorregulación: Mediante la vasoconstricción, vasodilatación y sudoración.
- Sensorial: Contiene receptores para el tacto, presión, dolor y temperatura.
- Metabólica: Participa en la síntesis de vitamina D con la exposición solar.
- Inmunológica: Contiene células de Langerhans que participan en la respuesta inmune.
- Excretora: Elimina agua, sales minerales y sustancias de desecho a través del sudor.
- Social y comunicativa: Transmite información sobre nuestro estado emocional y de salud.
1.3. Características de la piel según edad y condiciones
La piel experimenta cambios significativos a lo largo del ciclo vital:
- Recién nacidos y lactantes: Piel fina, delicada, con escaso desarrollo del manto hidrolipídico. Mayor permeabilidad y susceptibilidad a irritaciones.
- Niños y adolescentes: Aumento progresivo del grosor y resistencia. En adolescencia, mayor actividad de glándulas sebáceas.
- Adultos: Pleno desarrollo de todas las funciones cutáneas.
- Ancianos: Adelgazamiento de la piel, disminución de elasticidad, menor producción de sudor y sebo, tendencia a la sequedad y fragilidad.
2. NECESIDADES DE HIGIENE SEGÚN EDAD
2.1. Higiene en el recién nacido y lactante
- Características específicas: Piel delicada y sensible, mayor superficie corporal en relación al peso, termorregulación inmadura.
- Técnica de baño:
- Temperatura del agua: 36-37°C
- Duración: 5-10 minutos
- Productos: Jabones neutros o ligeramente ácidos, sin perfumes
- Frecuencia: Diaria o cada dos días
- Secado: Por contacto, no por fricción
- Cuidados especiales: Cordón umbilical, pliegues cutáneos, zona del pañal.
2.2. Higiene en el niño
- Características específicas: Mayor autonomía progresiva, piel más resistente.
- Técnica de baño:
- Fomento de la participación activa según edad
- Educación en hábitos higiénicos
- Supervisión para garantizar la seguridad
2.3. Higiene en el adulto
- Características específicas: Plena capacidad para el autocuidado en condiciones normales.
- Apoyo del TCAE: Principalmente en situaciones de dependencia por enfermedad.
- Educación sanitaria: Importancia de mantener hábitos higiénicos adecuados.
2.4. Higiene en el anciano
- Características específicas: Piel más seca y frágil, mayor riesgo de lesiones, posible limitación funcional.
- Técnica de baño:
- Temperatura del agua: Ligeramente más elevada (37-38°C)
- Evitar exposiciones prolongadas al agua
- Hidratación posterior de la piel
- Especial atención a pliegues y zonas de riesgo
- Frecuencia: Equilibrar necesidades de limpieza con el riesgo de resecar la piel (cada 2-3 días puede ser suficiente)
- Consideraciones especiales: Prevención de caídas, respeto al pudor, adaptación al ritmo del paciente.
3. NECESIDADES DE HIGIENE SEGÚN PESO
3.1. Pacientes con bajo peso
- Características específicas: Mayor prominencia de puntos de presión, menor acolchamiento natural.
- Cuidados específicos:
- Especial atención a prominencias óseas
- Uso de colchones antiescaras
- Cambios posturales más frecuentes
- Evitar fricciones y cizallamientos durante la higiene
3.2. Pacientes con obesidad
- Características específicas: Mayor humedad en pliegues, riesgo de intertrigo, dificultad para la movilización.
- Cuidados específicos:
- Secado minucioso de pliegues cutáneos
- Uso de productos absorbentes en zonas de pliegues
- Técnicas adecuadas de movilización
- Asegurar acceso a todas las zonas corporales
- Posible necesidad de más personal para la higiene
4. NECESIDADES DE HIGIENE SEGÚN PATOLOGÍA
4.1. Pacientes con patología neurológica
- Características específicas: Alteración del nivel de conciencia, déficits sensitivos y/o motores.
- Cuidados específicos:
- Evaluación del nivel de dependencia
- Estímulo de la participación según capacidades
- Prevención de contracturas durante la higiene
- Observación de respuestas a estímulos táctiles
4.2. Pacientes con patología respiratoria
- Características específicas: Disnea, dependencia de oxigenoterapia, fatiga.
- Cuidados específicos:
- Aseo fraccionado para evitar la fatiga
- Mantenimiento de la oxigenoterapia durante el procedimiento
- Posición con elevación de cabecera
- Evitar temperaturas extremas del agua
4.3. Pacientes con patología cardiovascular
- Características específicas: Riesgo de descompensación con esfuerzos, edemas, necesidad de monitorización.
- Cuidados específicos:
- Aseo adaptado a tolerancia al esfuerzo
- Vigilancia de signos de descompensación
- Especial cuidado con extremidades con edemas
- Mantenimiento de monitorización durante el procedimiento si es necesario
4.4. Pacientes con alteraciones de la piel
- Características específicas: Lesiones cutáneas, fragilidad, riesgo aumentado de infección.
- Cuidados específicos:
- Adaptación de productos según tipo de lesión
- Técnicas que minimicen el traumatismo cutáneo
- Seguimiento de protocolos específicos según tipo de lesión
- Coordinación con enfermería para tratamientos tópicos
4.5. Pacientes quirúrgicos
- Características específicas: Heridas, drenajes, limitación de movimientos.
- Cuidados específicos:
- Protección de heridas y drenajes durante el aseo
- Respeto a restricciones de movilidad
- Observación del estado de heridas y drenajes
- Aseo por zonas, evitando movilizaciones dolorosas
4.6. Pacientes en situación terminal
- Características específicas: Fragilidad extrema, fatiga, priorización del confort.
- Cuidados específicos:
- Higiene adaptada a necesidades y preferencias
- Énfasis en el confort más que en la exhaustividad
- Cuidado de mucosas
- Implicación de familia si lo desean
5. CUIDADOS DE LA PIEL Y MUCOSAS
5.1. Cuidados generales de la piel
- Hidratación: Aplicación de cremas hidratantes, especialmente tras el baño y en zonas secas.
- Inspección: Valoración sistemática del estado de la piel durante la higiene.
- Masaje: Técnicas de masaje suave para estimular la circulación.
- Prevención de lesiones: Identificación de zonas de riesgo y aplicación de medidas preventivas.
5.2. Cuidados de la piel en zonas especiales
- Pliegues cutáneos: Limpieza y secado meticuloso para prevenir maceración e intertrigo.
- Prominencias óseas: Inspección, higiene suave y medidas de protección.
- Zonas periestomales: Limpieza específica según tipo de estoma.
- Zonas con dispositivos: Cuidado alrededor de sondas, catéteres, etc.
5.3. Cuidados de las mucosas
- Mucosa oral: Higiene bucal, cuidado de encías, lengua y paladar.
- Mucosa ocular: Limpieza desde ángulo interno al externo con soluciones adecuadas.
- Mucosa nasal: Limpieza con suero fisiológico si es necesario.
- Mucosa genital: Técnicas específicas según género, con atención a pliegues y secreciones.
6. PROCEDIMIENTOS PARA PRESERVAR LA INTIMIDAD AL REALIZAR LA HIGIENE DEL PACIENTE
6.1. Consideraciones éticas y legales
- Derecho a la intimidad: Base ética y legal del respeto a la privacidad del paciente.
- Consentimiento: Información previa y obtención del consentimiento para el procedimiento.
- Dignidad: Protección de la dignidad personal durante todo el proceso.
6.2. Medidas físicas
- Uso de biombos y cortinas: Separación física del entorno.
- Cierre de puertas y ventanas: Garantía de privacidad.
- Exposición mínima: Descubrir solo la zona a lavar, manteniendo el resto cubierto.
- Control de la presencia de personal: Limitación a los profesionales estrictamente necesarios.
6.3. Medidas actitudinales
- Comunicación respetuosa: Explicación de cada paso del procedimiento.
- Respeto a preferencias: Adaptación a preferencias culturales o personales cuando sea posible.
- Discreción: Evitar comentarios innecesarios durante el procedimiento.
- Profesionalidad: Actitud profesional que normalice el procedimiento sin banalizar.
7. TÉCNICA DE HIGIENE DEL PACIENTE ENCAMADO
7.1. Clasificación de pacientes según grado de dependencia
- Paciente autónomo: Requiere supervisión o ayuda mínima.
- Paciente con dependencia parcial: Requiere ayuda para algunas actividades.
- Paciente con dependencia total: Requiere asistencia completa para la higiene.
7.2. Material necesario
- Lencería: Toallas, sábanas limpias, pijama o camisón.
- Productos de higiene: Jabón neutro, champú, crema hidratante.
- Material para cuidados específicos: Cepillo dental, crema de afeitar, etc.
- Material de protección: Guantes, empapadores.
- Accesorios: Palangana, jarra, cuña si es necesario.
7.3. Técnica de higiene total
Procedimiento:
- Preparación:
- Informar al paciente y solicitar su colaboración
- Preparar todo el material necesario
- Mantener temperatura adecuada en la habitación (22-24°C)
- Cerrar puertas/ventanas y colocar biombo
- Colocar cama en posición horizontal (si no está contraindicado)
- Lavarse las manos y ponerse guantes
- Desarrollo:
- Comenzar por los ojos (del ángulo interno al externo)
- Continuar con cara, orejas y cuello
- Lavar brazos, axilas y manos (especial atención a pliegues y espacios interdigitales)
- Tórax y abdomen (especial atención a pliegues submamarios en mujeres)
- Extremidades inferiores (de distal a proximal)
- Espalda y glúteos (colocando al paciente en decúbito lateral)
- Región genital (última zona, cambiar agua y guantes)
- Finalización:
- Secar completamente, con especial atención a pliegues
- Aplicar crema hidratante
- Vestir al paciente
- Peinar y realizar cuidados complementarios
- Dejar la habitación ordenada y al paciente en posición cómoda
7.4. Técnica de higiene parcial
Se realiza cuando no es necesario o no está indicado un baño completo, o como complemento entre baños completos:
- Aseo de cara y manos: Generalmente por las mañanas y después de las comidas.
- Aseo genital: Después de eliminaciones, en pacientes con incontinencia.
- Aseo de espalda y prominencias óseas: Para prevención de úlceras por presión.
7.5. Cuidados específicos durante la higiene
- Cuidado de ojos: Limpieza con gasa estéril y suero fisiológico de ángulo interno a externo.
- Cuidado de oídos: Limpieza del pabellón auricular sin introducir objetos en el conducto.
- Cuidado de nariz: Limpieza de fosas nasales si es necesario.
- Cuidado bucal: Cepillado de dientes o limpieza de mucosas en pacientes inconscientes.
- Cuidado del cabello: Lavado en cama cuando sea necesario.
- Afeitado: Técnica húmeda o eléctrica según preferencia y condiciones.
8. TÉCNICA DE BAÑO ASISTIDO: DUCHA Y BAÑERA
8.1. Valoración previa
- Capacidad del paciente: Evaluación del grado de ayuda necesario.
- Estado clínico: Contraindicaciones para determinados tipos de baño.
- Riesgo de caídas: Evaluación de equilibrio y fuerza.
- Preferencias: Ducha vs. bañera, hora del día, productos.
8.2. Técnica de ducha asistida
Procedimiento:
- Preparación:
- Reunir material necesario
- Verificar condiciones de seguridad (suelo no resbaladizo, asideros)
- Temperatura adecuada del agua (36-38°C) y del ambiente
- Accesibilidad de útiles de aseo
- Desarrollo:
- Acompañar al paciente hasta la ducha
- Proporcionar apoyo físico según necesidades
- Ayudar en la limpieza de zonas de difícil acceso
- Supervisar para prevenir caídas
- Finalización:
- Secado completo, especialmente pies y pliegues
- Aplicación de crema hidratante
- Ayuda para vestirse
- Acompañamiento de regreso a la habitación
8.3. Técnica de baño en bañera
Procedimiento:
- Preparación:
- Comprobar temperatura del agua (37-40°C)
- Nivel de agua adecuado (no excesivo)
- Colocación de alfombrilla antideslizante
- Asideros accesibles
- Desarrollo:
- Ayuda para entrar y salir de la bañera (momento de mayor riesgo)
- Supervisión continua, nunca dejar solo al paciente
- Tiempo de inmersión limitado (10-15 minutos)
- Finalización:
- Similar a la ducha, con atención especial al secado
8.4. Adaptaciones según necesidades especiales
- Sillas y asientos de ducha: Para pacientes con problemas de equilibrio.
- Barras y asideros: Colocación estratégica para facilitar movimientos.
- Duchas de mano: Para mayor control del agua.
- Tablas de bañera: Para facilitar la transferencia.
9. MOVILIZACIÓN DEL PACIENTE Y CAMBIOS POSTURALES
9.1. Principios básicos de mecánica corporal
- Alineación corporal: Mantener la espalda recta y alineada.
- Base de sustentación: Separar los pies para aumentar la estabilidad.
- Centro de gravedad: Mantenerlo bajo, flexionando las rodillas.
- Utilización del peso corporal: Para contrarrestar la carga.
- Uso de grandes grupos musculares: Preferir piernas a brazos.
9.2. Técnicas de movilización durante la higiene
- Movilización hacia la cabecera de la cama:
- Con paciente colaborador: Pedir que flexione rodillas y se impulse
- Con paciente no colaborador: Técnica en bloque con dos o más personas
- Giro decúbito supino a lateral:
- Colocar al paciente al borde contrario al giro
- Cruzar la pierna del lado hacia donde girará sobre la otra
- Colocar brazo del lado del giro hacia el tórax
- Girar en bloque, sujetando hombro y cadera
9.3. Cambios posturales
Los cambios posturales son esenciales para prevenir úlceras por presión y complicaciones respiratorias en pacientes encamados. Deben realizarse cada 2-3 horas.
Principales posiciones:
- Decúbito supino o dorsal:
- Paciente boca arriba
- Almohadas: bajo cabeza, huecos poplíteos y talones elevados
- Previene presión en: occipucio, escápulas, codos, sacro y talones
- Decúbito lateral:
- Paciente de lado (30°)
- Almohadas: cabeza, espalda, entre piernas
- Previene presión en: orejas, hombros, crestas ilíacas, trocánteres, rodillas, maléolos
- Decúbito prono o ventral:
- Paciente boca abajo
- Almohadas: bajo cabeza, abdomen, piernas
- Previene presión en: mejillas, orejas, acromion, costillas, genitales, rodillas, dedos
- Posición de Fowler o semisentado:
- Elevación de cabecera (45-60°)
- Almohadas: regiones lumbar, poplítea
- Útil para comer, higiene y pacientes con problemas respiratorios
9.4. Consideraciones especiales según patologías
- Pacientes con ACV: Evitar posición prolongada sobre lado afectado.
- Pacientes con fracturas: Mantener alineación según indicaciones.
- Pacientes con prótesis de cadera: Evitar flexión >90° y rotación interna.
- Pacientes con problemas respiratorios: Priorizar posiciones que faciliten ventilación.
4. CONCLUSIONES
La higiene del paciente constituye una actividad fundamental dentro de las competencias del TCAE, que va mucho más allá de la simple limpieza corporal. Es un procedimiento que permite valorar el estado general del paciente, prevenir complicaciones y proporcionar confort, además de establecer una relación terapéutica basada en la confianza y el respeto.
La adaptación de las técnicas de higiene según la edad, el peso y la patología del paciente resulta esencial para proporcionar cuidados individualizados y de calidad. Para ello, el TCAE debe poseer conocimientos sólidos sobre los principios anatomofisiológicos de la piel, las diferentes técnicas de higiene, y los procedimientos adecuados para preservar la intimidad del paciente durante estos cuidados.
La higiene, combinada con una correcta técnica de movilización y la realización de cambios posturales, constituye un pilar básico en la prevención de úlceras por presión y otras complicaciones asociadas a la inmovilidad. Por tanto, es responsabilidad del TCAE realizar estos procedimientos con rigor técnico y sensibilidad humana, contribuyendo así a la recuperación y bienestar de los pacientes.
En definitiva, la aplicación competente de los conocimientos y técnicas desarrollados en este tema permitirá al TCAE cumplir con su importante papel dentro del equipo asistencial, garantizando unos cuidados humanizados y de calidad a todos los pacientes, independientemente de sus características y necesidades específicas.
5. CASOS PRÁCTICOS O EJEMPLOS ILUSTRATIVOS
Caso 1: Paciente anciano con dependencia parcial
Situación: Varón de 82 años ingresado en planta de Medicina Interna por neumonía. Presenta limitación funcional parcial por artrosis avanzada de cadera y rodilla. Piel seca y frágil con riesgo moderado de úlceras por presión (Escala Norton: 12).
Actuación del TCAE:
- Preparación del material necesario y explicación del procedimiento al paciente.
- Preservación de su intimidad mediante el uso de biombo y exposición mínima del cuerpo.
- Realización de higiene en cama con técnica mixta: el paciente colabora en la higiene de cara y parte superior del cuerpo, mientras el TCAE realiza la higiene de zonas menos accesibles.
- Observación exhaustiva del estado de la piel, especialmente en prominencias óseas.
- Secado meticuloso y aplicación de crema hidratante, con especial atención a talones, sacro y trocánteres.
- Realización de cambio postural tras la higiene, colocando al paciente en posición cómoda.
- Registro de la actividad y de las observaciones realizadas.
Caso 2: Paciente obeso en situación postquirúrgica
Situación: Mujer de 50 años con IMC de 38, ingresada tras colecistectomía. Presenta herida quirúrgica en hipocondrio derecho y drenaje. Dificultad para la movilización por dolor y obesidad.
Actuación del TCAE:
- Planificación del procedimiento: solicitar ayuda de otro TCAE para la movilización.
- Preparación del material específico: toallas de mayor tamaño, productos para pliegues cutáneos.
- Realización de higiene por partes, priorizando cara, manos y pliegues cutáneos.
- Protección de herida quirúrgica y drenaje durante el procedimiento.
- Secado exhaustivo de pliegues submamarios, abdominales, inguinales y perineales.
- Aplicación de productos específicos para prevenir intertrigo en pliegues.
- Movilización coordinada entre dos técnicos, aplicando principios de mecánica corporal.
- Educación sanitaria sobre cuidados de la piel y prevención de complicaciones.
Caso 3: Paciente con patología neurológica severa
Situación: Paciente de 35 años con tetraparesia espástica por traumatismo craneoencefálico. Totalmente dependiente, con sonda vesical permanente y gastrostomía endoscópica percutánea (PEG). Riesgo alto de úlceras por presión.
Actuación del TCAE:
- Valoración del estado del paciente antes de iniciar la higiene.
- Realización de higiene completa en cama con ayuda de otro profesional.
- Aplicación de técnicas específicas para prevenir espasticidad durante la movilización.
- Cuidados específicos de las zonas periostomales (PEG).
- Higiene meticulosa de genitales y zona perianal por incontinencia fecal.
- Cuidados bucales exhaustivos por incapacidad de autoaseo.
- Realización de cambios posturales cada 2 horas, usando dispositivos antiescaras.
- Implicación de la familia en los cuidados, si lo desean, como parte del proceso terapéutico.
6. CUESTIONARIO DE PREGUNTAS
Pregunta 1 (Actualizada 2025)
La temperatura adecuada del agua para realizar la higiene de un paciente adulto debe ser:
A) Entre 32-34°C
B) Entre 36-38°C
C) Entre 40-42°C
D) Entre 26-30°C
✅ Respuesta correcta: B) Entre 36-38°C
📌 Explicación:
- La temperatura idónea para el baño de un paciente adulto debe ser entre 36-38°C, ya que proporciona confort sin riesgo de quemaduras o hipotermia
- Las opciones A y D presentan temperaturas demasiado frías que pueden provocar incomodidad y enfriamiento
- La opción C presenta una temperatura excesivamente alta que podría causar quemaduras o vasodilatación excesiva
📌 Referencia: Protocolos de higiene hospitalaria del Servicio Andaluz de Salud
Pregunta 2 (Actualizada 2025)
Durante la técnica de higiene del paciente encamado, ¿qué orden es el correcto?
A) Genitales, cara, tronco, extremidades, espalda
B) Cara, cuello, tronco, extremidades, genitales, espalda
C) Espalda, genitales, extremidades, tronco, cara
D) Tronco, cara, extremidades, espalda, genitales
✅ Respuesta correcta: B) Cara, cuello, tronco, extremidades, genitales, espalda
📌 Explicación:
- La higiene debe comenzar por la zona más limpia (cara) y continuar hacia las zonas potencialmente más contaminadas (genitales)
- Las zonas más contaminadas se lavan al final para evitar trasladar microorganismos a zonas más limpias
- La espalda se lava generalmente al final porque requiere un cambio de posición del paciente
- Siempre se debe cambiar el agua y los guantes antes de lavar los genitales
📌 Referencia: Procedimientos estandarizados de cuidados básicos de enfermería del SAS
Pregunta 3 (Actualizada 2025)
¿Cuál de las siguientes medidas es fundamental para preservar la intimidad del paciente durante la higiene?
A) Realizar el procedimiento lo más rápido posible
B) Exponer todo el cuerpo del paciente para un aseo más eficiente
C) Descubrir únicamente la zona que se está aseando en ese momento
D) Permitir la entrada de todo el personal sanitario para agilizar el proceso
✅ Respuesta correcta: C) Descubrir únicamente la zona que se está aseando en ese momento
📌 Explicación:
- Exponer solo la zona que se está aseando minimiza la exposición innecesaria del cuerpo y preserva la dignidad
- La rapidez en el procedimiento (opción A) no debe comprometer la calidad del aseo ni el respeto a la intimidad
- Exponer todo el cuerpo (opción B) vulnera gravemente el derecho a la intimidad del paciente
- La presencia de personal no necesario (opción D) es inapropiada y viola la confidencialidad e intimidad
📌 Referencia: Código Deontológico y protocolos de respeto a la intimidad del SAS
Pregunta 4 (Actualizada 2025)
En relación a los cambios posturales para pacientes encamados, señale la afirmación INCORRECTA:
A) Deben realizarse generalmente cada 2-3 horas
B) En pacientes de alto riesgo se pueden realizar cada 6-8 horas
C) Ayudan a prevenir úlceras por presión
D) Deben registrarse en la documentación del paciente
✅ Respuesta correcta: B) En pacientes de alto riesgo se pueden realizar cada 6-8 horas
📌 Explicación:
- Los pacientes de alto riesgo requieren cambios posturales más frecuentes (cada 1-2 horas), no menos
- La frecuencia estándar es cada 2-3 horas (opción A), lo cual es correcto
- Los cambios posturales son fundamentales para prevenir las úlceras por presión (opción C), lo cual es correcto
- El registro de los cambios posturales es obligatorio para asegurar la continuidad de cuidados (opción D), lo cual es correcto
📌 Referencia: Protocolo de prevención y tratamiento de úlceras por presión del SAS
Pregunta 5 (Actualizada 2025)
Entre las funciones de la piel NO se encuentra:
A) Protección frente a agentes externos
B) Absorción de nutrientes esenciales
C) Termorregulación
D) Producción de vitamina D con exposición solar
✅ Respuesta correcta: B) Absorción de nutrientes esenciales
📌 Explicación:
- La piel no es un órgano diseñado para la absorción de nutrientes; esta función corresponde principalmente al sistema digestivo
- La protección frente a agentes externos (opción A) es una función primordial de la piel, actuando como barrera
- La termorregulación (opción C) es una función esencial de la piel a través de la vasodilatación, vasoconstricción y sudoración
- La piel participa en la síntesis de vitamina D cuando se expone a la radiación ultravioleta (opción D)
📌 Referencia: Manual de anatomía y fisiología para profesionales sanitarios
Cuestionario TCAE – Tema 19
Necesidades de higiene en el paciente según edad, peso y patología
Instrucciones
Este cuestionario consta de 20 preguntas tipo test relacionadas con el Tema 19 de las oposiciones al SAS para Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería.
Para cada pregunta, selecciona la respuesta que consideres correcta y pulsa «Comprobar». Después de responder, podrás ver la explicación detallada.
Al finalizar el test, obtendrás tu puntuación global.
Pregunta 1 (Actualizada 2025)
La temperatura adecuada del agua para realizar la higiene de un paciente adulto debe estar entre:
✅ Respuesta correcta: B) 36-38°C
📌 Explicación:
- La temperatura idónea para el baño de un paciente adulto debe ser entre 36-38°C, ya que proporciona confort sin riesgo de quemaduras o hipotermia.
- Las opciones A y D presentan temperaturas demasiado frías que pueden provocar incomodidad y enfriamiento.
- La opción C presenta una temperatura excesivamente alta que podría causar quemaduras o vasodilatación excesiva.
📌 Referencia: Protocolos de higiene hospitalaria del Servicio Andaluz de Salud
Resultados del cuestionario
7. MAPA CONCEPTUAL
8. REFERENCIAS NORMATIVAS Y BIBLIOGRÁFICAS
Normativa
- Estatuto del Personal Sanitario No Facultativo de la Seguridad Social. Orden del Ministerio de Trabajo de 26 de abril de 1973.
- Ley 41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la autonomía del paciente y de derechos y obligaciones en materia de información y documentación clínica.
- Ley 16/2003, de 28 de mayo, de cohesión y calidad del Sistema Nacional de Salud.
- Ley 55/2003, de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud.
- Ley 33/2011, de 4 de octubre, General de Salud Pública.
- Ley 4/2017, de 25 de septiembre, de los Derechos y la Atención a las Personas con Discapacidad en Andalucía.
- Decreto 77/2008, de 4 de marzo, de ordenación administrativa y funcional de los servicios de Salud Mental en el ámbito del Servicio Andaluz de Salud.
Bibliografía
- Báez Hernández, F.J., Nava Navarro, V., Ramos Cedeño, L., & Medina López, O.M. (2023). Manual de procedimientos en cuidados auxiliares de enfermería. Editorial Médica Panamericana.
- Cantero González, M.L., & García Fernández, F.P. (2024). Técnicas básicas de enfermería. Editorial McGraw-Hill.
- Consejería de Salud de la Junta de Andalucía. (2024). Protocolos de prevención y tratamiento de úlceras por presión. Servicio Andaluz de Salud.
- Fernández Rodríguez, A. (2021). Funciones del TCAE en los cambios posturales. Revista Ocronos, 4(12), 385.
- García Fernández, F.P., & Soldevilla Agreda, J.J. (2023). Guía para la prevención y manejo de las UPP y heridas crónicas. Ministerio de Sanidad.
- Hospital Universitario Virgen del Rocío. (2022). Normas básicas de mecánica corporal: Manual clínico. Sevilla.
- Hospital Universitario Virgen del Rocío. (2022). Movilización del paciente: Manual clínico. Sevilla.
- Kozier, B., Erb, G., Berman, A., & Snyder, S. (2023). Fundamentos de Enfermería: Conceptos, Proceso y Práctica. Pearson Educación.
- Martín Muñoz, B., & Pérez Redondo, M. (Coords.) (2023). Procedimiento General para TCAEs: aplicación de cuidados básicos. Editorial Elsevier España.
- Pérez de la Plaza, E., & Fernández Espinosa, A.M. (2024). Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (8ª ed.). McGraw-Hill.
- Potter, P.A., Perry, A.G., Stockert, P., & Hall, A. (2023). Fundamentos de enfermería (10ª ed.). Elsevier España.
- Servicio Andaluz de Salud. (2025). Manual de protocolos y procedimientos generales de enfermería. Consejería de Salud y Consumo.
Recursos web
- Escuela de Salud. Clínica Universidad de Navarra. La piel. Capas, características y funciones. https://www.cun.es/escuela-salud/piel
- Formación Acreditada. Curso en TCAE Servicio Andaluz de Salud – OPE SAS 2025. https://formacionacreditada.com/curso/tcae-servicio-andaluz-de-salud-ope-sas-2025
- Revista Médica Ocronos. Protocolos del TCAE en la higiene del paciente ingresado en un hospital. https://revistamedica.com/protocolos-tcae-higiene-pacientes/
- Servicio Andaluz de Salud. Coronavirus SARS-CoV-2: Información y protocolos asistenciales. https://www.sspa.juntadeandalucia.es/servicioandaluzdesalud/profesionales/apoyo-la-atencion-sanitaria/coronavirus-sars-cov-2-informacion-y-protocolos-asistenciales